Recogida de pilas en España
España se encuentra en la actualidad al nivel de los países europeos con mayor tradición de recogida de pilas, como Francia, Suecia o Finlandia.
Con más de 550 empresas adheridas, es la principal plataforma de los Sistemas Integrados de Gestión (SIG) de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) y pilas usadas en nuestro país: su cuota de representatividad es de casi el 70% en pilas portátiles y de más del 25% en pilas y baterías industriales. Según Lema, Recyclia recogía en 2011 un total de 3.031 toneladas de pilas, un 21% más que el año anterior. Esta cantidad equivale a más del 34% de las pilas y baterías puestas a la venta en España en dicho año. ERP España, el segundo SIG de residuos de pilas y baterías en España, recuperaba en 2011 un total de 901.027 kilos de dichos residuos, según Matías Rodrigues, su director general. «Esto supone un 23% de las pilas y acumuladores puestas en el mercado por nuestros productores», añade Rodrigues. Con 60 empresas adheridas, la cuota de mercado de ERP España en las pilas portátiles (las que usan los consumidores) es del 34%. Por comunidades autónomas, casi todas superaban en 2011 el objetivo mínimo legal de reciclar el 25% de los residuos de pilas, según datos de Ecopilas. Este hecho se producía por primera vez desde el comienzo de la fundación y la obligatoriedad legal de la recogida selectiva de pilas y baterías.
La evolución de la recogida de pilas en España es positivo. Julio Lema señala que desde 2009, primer ejercicio completo de actividad de Ecopilas, han gestionado más de 5.000 toneladas de pilas y acumuladores usados.
Matías Rodrigues apunta que en 2009 (primer año completo de actividad) ERP España recogió 429.560 kilos de pilas.
No obstante, Lema reconoce que todavía hay margen de mejora, si se compara a España con los países europeos que más pilas recogen: Bélgica, con más del 50%, y Alemania y Holanda, con más del 40%. Además, la legislación sobre recogida de pilas establece que para 2015 se deben recoger el 45% de las pilas puestas en el mercado español. Los consumidores son esenciales para aumentar el reciclaje de pilas.
Entre ellos, encartes en los principales periódicos de tirada nacional con 2.700.000 mini-recopiladores de cartón para recoger en casa las pilas usadas, una Escuela de Reciclaje en centros educativos o colaboraciones con el deporte profesional, amateur y junior.
El Real Decreto 208/2005, que regula en la actualidad la gestión de RAEE en España, pasará el testigo a la Directiva RAEE II.
La ley se propone unos objetivos aún más ambiciosos: frente a los actuales cuatro kilos por habitante y año, para 2016 deberán recogerse 45 de cada 100 toneladas de aparatos eléctricos y electrónicos puestos en el mercado de cada país miembro. En 2019, el porcentaje deberá alcanzar el 65% de los RAEE puestos a la venta cada año o el 85% de los RAEE generados en cada país. La nueva Directiva aumentará el control y las sanciones por malas prácticas, como el traslado ilegal de residuos producidos en la UE a otros países o la importación de productos ilegales. Las pilas legales deben contener un máximo de cinco partes por millón de mercurio, una sustancia química tóxica para el medio ambiente y la salud. Sin embargo, las pilas ilegales pueden llevar más de mil partes de mercurio por millón.
Fuente: Consumer.es